En los últimos días se ha vuelto viral un cortometraje realizado en el 2010 que expone un sencillo panorama: Si los hombres estuvieran en nuestro lugar, y nosotras en el lugar de ellos.
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Dirigido por la cineasta francesa Eléonore Pourriat, el corto se titula “Mayoría oprimida” y cuenta un día en la vida de Pierre, en una sociedad dominada por el “hembrismo”.
En el mundo de Pierre, las mujeres hostigan a los hombres mirando sus traseros, algunos de ellos son obligados a vestirse de pies a cabeza mientras ellas pueden andar con el pecho descubierto, son acosados en las calles y en una de esas ocasiones, Pierre intenta defenderse verbalmente ante un grupo de mujeres que luego ejercen violencia hasta abusar sexualmente de él.
Después de ser atendido y emitir su declaración, debe tolerar a la falta de seriedad en las instancias de justicia, por supuesto dominadas por el sexo femenino, cuya representante se dirige a un subordinado mirándolo de forma pícara y haciendo un comentario sobre su ropa. Para culminar la historia, nuestro chico Pierre se enfrenta también a la incomprensión de su pareja quien lo responsabiliza del ataque y le dice que es su culpa por la manera en que viste.
Según la directora, la idea del cortometraje nació de una anécdota en la que ella intentaba explicarle a su esposo cómo era acosada en la calle, a lo que él le expresó que “eso era increíble”. De ahí Eléonore Pourriat concluyó en que los hombres a veces no tienen culpa de no saber lo que es sufrir violencia sexual ya que no son confrontados en circunstancias con las que lidian diariamente las mujeres; y bajo esa premisa realizó una historia donde los papeles son invertidos para hacer más efectiva la empatía sobre el tema.
De hecho, debo admitir que me sentí muy conmovida por el personaje masculino más que si se tratase de uno femenino, y eso lamentablemente es un reflejo de cuán machista es nuestra cultura y los medios, pues estamos acostumbrados a ver estas omisiones y otras formas de violencia contra la mujer como algo habitual.
Por favor mujeres, pero especialmente hombres, no dejen de echarle un vistazo a este cortometraje que, aunque al inicio pareciera cómico, expone una realidad bastante seria.
Fuente: The Guardian
