La minería deja una estela de destrucción, erosión, devastación y contaminación. Mientras que la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) da su “visto bueno” a algunos proyectos —ellos sabrán sus razones o el tamaño de la mordida, quien sabe—, todavía existen gobernantes íntegros que defienden su tierra como de lugar.
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En el municipio de Tetela de Ocampo, Marco Antonio Uribe Peña, asegura que su administración no entregará licencias para la operación de las minas Espejeras y Frisco, ambas de Carlos Slim. Tampoco se autorizará el cambio de uso de suelo, que permitiría la exploración, excavación y extracción de los minerales que ahí se encuentran.
Desde su campaña, el regidor se ha pronunciado en contra de la minería; actividad que pone en peligro el equilibrio ambiental de la zona, así como la calidad de los recursos naturales.
A Uribe Peña le quedan sólo cuatro meses en función y, a la fecha, no ha recibido ninguna solicitud para el funcionamiento de las minas. En tal caso, el trámite será recibido, como cualquier otro, aún sabiendo la resolución a la misma. Simplemente, mientras él esté a cargo, no habrá permisos de su parte.
La defensa de su municipio y el rechazo entre la población es tal que, cuando salga de su puesto, el ahora presidente municipal se unirá a la población que exige la salida de Frisco de su territorio.
La gente no se va a quedar cruzada de brazos, y cuando los tetelenses vean un movimiento grande de maquinaria, la gente se va a levantar y estoy seguro que no van a dejar a entrar a nadie ajeno.
El caso Tetela es otra muestra más del México Mágico, donde se dice una cosa y se hace otra. En su momento, al ser consultada la SEMARNAT y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), ambas se opusieron a la instalación de Frisco en la localidad. Para la sorpresa del presidente municipal y la población, SEMARNAT autorizó la exploración por dos años, en busca de oro.
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Con la fuerza del pueblo, esperemos que Tetela no permita ser otra catástrofe minera, que sólo dejará devastación ambiental, contaminación, enfermedades, erosión. Hasta cuándo veremos casos como este.
Fuente: La Jornada de Oriente
Foto: Coyotekoho (Wikimedia) / (cc) by