Hoy hay que celebrar sin especismo alguno. Porque TODXS sin distinción estamos de día. Quienes formamos parte del Reino Animal, compartimos una conciencia intersubjetiva, que lamentablemente a causa del lenguaje y las demás estructuras sociales, culturales, políticas y económicas nos hacen deformarla y creernos superiores al resto de los habitantes del Tercer Planeta.
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Más que pensar lo lindos que son los animales, el beneficio que nos dan en la cruel industria alimenticia, de pieles y demás aprovechamiento que hacemos de ellos, incluso como mascotas, debemos de una vez por todas situarnos desde una postura ecocentrica, donde el foco no esté en la humanidad, sino en la totalidad de la vida planetaria.
Esto es básico para avanzar en temas tan relevantes como el sistema económico con su base en la destrucción de los recursos naturales y con eso los ecosistemas en donde se daña la biodiversidad y el ciclo natural de todas las especies. No es parte de un proceso orgánico estar siendo más que testigos, verdaderos cómplices de la Sexta Extinción.
Las causas de las diferentes crisis siempre las transferimos aludiendo a que es “natural”, sin hacernos responsables de la enorme huella que dejamos en el mundo, sometiendo al resto de los habitantes en una relación asimétrica que causa ecocidios y holocaustos constantes.
La humanidad debe hacerse responsable de su falta de conciencia. Más aún cuando existe la evidencia científica que tienen conciencia todos los mamíferos, aves y otras criaturas, incluyendo pulpos.
Si estás aún sintiéndote realmente el más importante, el más inteligente, el más supersayayin del Universo, te recomiendo ver la excelente animación: La Planète Sauvage, de René Laloux.
