Cuando se comienza una rutina de ejercicios, todo el mundo tiene una teoría o una sugerencia para aprovecharlas. Me ha tocado escuchar que es mejor comer algo antes del ejercicio, o después. También seguro les han recomendado comer más proteína, etc. La verdad es todo muy confuso, y a la hora de empezar el ejercicio, uno comienza a sentir un hambre tremenda y a comer todo lo que se le pone enfrente.
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No está de más decir que no es la mejor alternativa. Si le das a tu cuerpo justo aquello que necesita antes, después y durante el ejercicio, seguro aprovecharás mejor los hábitos saludables que hayas decidido tomar.
1. Avena
Cuando se trata de preparar los músculos para hacer ejercicio, los carbohidratos son su mejor aliado. Proporcionan glucosa, el combustible para tus músculos. Claro, no todos los carbohidratos son iguales, la avena es rica en beta-glucano, fibra que retarda la digestión y mantiene azúcar en la sangre a un nivel estable.
2. Café
Tomar 360 ml de café antes de irte al gimnasio te ayuda a aumentar tu resistencia. También ayuda a que no sientas tan fuertes los dolores musculares después del ejercicio. Si te preocupa la deshidratación por el café, estudios han encontrado que esta bebida no te causará problemas al respecto.
3. Ostras
Estos moluscos contienen mucho hierro, necesario para la hemoglobina, que transporta el oxígeno por todo el cuerpo.
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4. Almendras
Cuando haces ejercicio de manera más intensa, tu cuerpo produce más radicales libres que lo dañan. Las almendras son una buena fuente de antioxidantes como los flavonoides, ácidos fenólicos y vitamina E, que te protege de los radicales libres.
5. Pasas
Sáltate las barritas y come un puñado de pasas mejor. Aumentan tu energía y tus niveles de potasio, además de ser igual de portátiles. Sólo un puñado de estos frutos secos tiene más potasio que un plátano. Este mineral nunca está de más para tus músculos, en especial si te quieres saltar los calambres.
6. Agua
Seguro que esto ya lo sabías, pero no está de más mencionarlo. En realidad, a menos de que vayas a hacer más de una hora de ejercicio o sudes mucho, tu cuerpo tiene suficiente con el H2O, no necesitas bebidas rehidratantes.
7. Ricotta bajo en grasas y miel
Después de una sesión de ejercicio, los músculos necesitan proteínas para reparar y reconstruir. La proteína del suero utilizado para hacer queso ricotta, es una excelente selección. El suero es rico en lactoglobulina tipo B, una proteína que es muy eficaz en la estimulación de resíntesis muscular.
8. Salmón
Con 22 gramos de proteína de alta calidad por cada tres onzas de salmón, le proporcionas los elementos básicos que tu cuerpo necesita para que el tejido muscular se vuelva a sintetizar después de una dura sesión de ejercicios. También es la fuente número uno de la naturaleza de la vitamina D.
9. Jugo de tomate
El cardio no sólo hace que pierdas fluidos, también pierdes sodio y potasio. En vez de ir por una bebida rehidratante, toma un poco de jugo de tomate para recuperarlos. Con 250 mililitros, vas a consumir más potasio del que te puede dar una bebida deportiva.
10. Jengibre
En especial si tu rutina de ejercicios te está dejando adolorido. Esta raíz te ayuda a reducir los dolores, así que sáltate el relajante muscular. Pero no te preocupes por su sabor amargo, con una bebida que lo contenga, podrás sentir alivio después del ejercicio.
Fuente: Cooking light