Se esperan mayor cantidad de sequías y, en algunas partes, mayores precipitaciones debido a que caerá lluvia y no nieve. En la cuenca del río Columbia, la capa de nieve primaveral se prevé que disminuirá a más de la mitad para 2100. Esto hará que el agua disponible en verano sea menor en algunos ríos, lo que implicaría dificultades para los agricultores que dependen de esas corrientes para el riego de sus cultivos.
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El Proyecto Bell Rapids ha desarrollado más de 10.000 hectáreas de tierras irrigadas por arriba del río Snake, cuando el agua era barata y abundante. A medida que la competencia por esa agua creció, aumentó el costo de riego y los precios de las cosechas cayeron, lo que hizo más difícil justificar Bell Rapids.
El estado compró los derechos de agua del proyecto para apoyar la recuperación del salmón y la trucha. Nuevos parques eólicos vinieron a ayudar a la economía local y a que los productores de papa capitalizaran en usos más rentables.
La menor cantidad de deshielo afectará a la energía hidroeléctrica, el salmón, los productores locales y varias ciudades en el oeste. Mientras los agricultores de Bell Rapids consiguieron realizar con éxito la transición desde la agricultura de regadío a otros modelos, otros granjeros no han sido tan afortunados. Los vientos de cambio soplan en todas direcciones, creando nuevas oportunidades y desafíos tanto para el paisaje como para el hombre.
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Links:
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Fuente: Facing Climate Change: Potato Farmers (Ecology)
