Charles Moore descubrió accidentalmente el “séptimo continente” en 1999 durante una expedición. Se trata de una enorme montaña de basura que se arremolina por la fuerza de las corrientes y los vientos creando un vórtice del Pacífico Norte. Posee toda clase de objetos: desde redes de pesca, pasando por cepillos de dientes, boyas y un largo etcétera, además de pequeñisimas piezas que entran en la dieta de diversos organismos y animales marinos entrando en la cadena alimenticia de los humanos que ya tenemos metido en las venas el nocivo BPA.
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En Isla Basura: Un documental indispensable para entender la problemática del plástico, se ve la dramática situación en la que mueren unas 200.000 aves a causa de la ingesta de plástico.
Pero ¿Dónde está ubicada exactamente esta prueba inequívoca de la inconsciencia ecológica del progreso humano? La georreferenciación de este monstruo residual de la modernidad, puede servir bastante para generar la noción de realidad y no solo verlo como un suceso seudo mitológico de “se dice que en medio del Pacífico, hay una isla de basura”. Es un hecho y es hora de internalizarlo.
Si quieres ver la ubicación exacta, pincha aquí.
Link: Isla Basura: Un documental indispensable para entender la problemática del plástico
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