Muchas veces nos han contado la historia sobre como un meteorito proveniente del espacio exterior extinguió casi toda la vida en la Tierra. Pero no fue hasta hace relativamente poco tiempo que me enteré que el meteorito había caído tan cerquita de dónde yo vivía, que por esa época vivía en Mérida.
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El meteorito que extinguió a los dinosaurios aterrizó en Chixchulub, Yucatán. El cráter de Chicxulub es un antiguo cráter de impacto que se encuentra al noreste de la Península de Yucatán y mide 180 kilómetros de diámetro. Sorprendentemente, no fue descubierto sino hasta finales de la década de los 70s a pesar de su gran tamaño.
Cuando los científicos analizaron las rocas, se demostró que el evento sucedió hasta finales del periodo Cretácico, de hace 64 millones de años.
El efecto en la península de Yucatán es curioso. En palabras de un geólogo, el suelo de esta zona quedó un poco hueco. Si alguien tomara un cuchillo (suponiendo que fuera comida, claro), y le cortara la tapa, quedaría una especie de queso hueco.
De hecho, si alguien vive o ha visitado la península, habrá notado que cuando llueve el suelo se inunda, pero al poco rato se seca. O que no es el mejor lugar para sembrar y cultivar. Esto se relaciona en gran medida debido al meteorito que cayó en la península que dejó el suelo calizo y un poco difícil para algunas actividades de agricultura.
Pero no todo son malas noticias. Gracias a la estructura laberíntica que tiene el subsuelo, la península de Yucatán está llena de ríos subterráneos y fuentes de agua llamadas cenotes que los pueblos Mayas considerarían sagrados. Y que ahora, son una maravilla natural que vale mucho la pena visitar.
Link: Dos asteroides pueden ser los responsables de la extinción de los dinosaurios
