Me pondré el parche antes de la herida, puede que a muchos les interese un cuesco lo que pasa con la corona británica y les encuentro razón. Es insólito que a estas alturas aún existan monarquías que además vivan a costa de los impuestos de todos los ciudadanos.
PUBLICIDAD
Bueno pero ese no es el asunto que nos convoca en este artículo. Lo que quiero contarles tiene relación con la noticia del embarazo de Kate Middleton ya que coincidentemente ayer se aprobó la nueva ley de sucesión al trono, desde hace 300 años brindaba solo al primogénito varón el poder de ser nombrado rey de Inglaterra, en su defecto el segundo hijo y así sucesivamente; como última alternativa tocaba el turno a la mujer. Ahora esto ya no ocurrirá más porque todas las naciones de la Commonwealth aprobaron la reforma eliminará la primacía masculina en la sucesión al trono.
Según elmundo.es la Ley de Instauración data de 1701 y “establece que los hombres tienen preferencia sobre las mujeres en la línea de sucesión y que la primogénita de un monarca no puede heredar si tiene un hermano más joven”. El viceprimer ministro, Nick Clegg, declaró a la prensa que “Éste es un momento histórico para nuestro país y nuestra monarquía. Las personas de todos los reinos de la Commonwealth celebrarán la noticia de que el duque y la duquesa de Cambridge esperan su primer hijo (…) Sin importar si ese bebé es un niño o una niña, tenga igual derecho a acceder al trono”.
Sin duda es un avance para el reconocimiento de la mujer en Inglaterra y especialmente en la monarquía que ya está bastante obsoleta, seguramente esta es una manera de buscar la aprobación de la ciudadanía que tanto la ha criticado.
