El hit de Juan Luis Guerra “El costo de la vida sube otra vez” sigue más vigente que nunca. Los chilenos lo sabemos muy bien. La energía es de la más cara de Latinoamérica dado a la alta concentración del mercado. Solo tres empresas producen electricidad (Aes Gener, Endesa y Colbún).
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Por si fuera poco, la generación eléctrica, es sumamente sucia
El Sistema Interconectado del Norte Grande se abastece en un 99,6% de termoeléctricas con base a carbón y solo 0,4% por medio de hidroeléctricas, mientras que el Sistema Interconectado Central se estructura en base a un 44% hidroeléctricas, 52% termoeléctricas y solo un 4% de Energías Renovables No convencionales ( ERNC).
Pero no te sientas culpable, porque el apremio energético no es a causa del gasto domiciliario. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) el consumo de electricidad lo lidera la minería con un 34% seguido por el industrial con un 28%. Suma. Un 72% se va en el gasto de actividades productivas que cuentan con importantes subsidios y como siempre son los ciudadanos los que reciben la peor parte.
Las cuentas de la luz nos hacen brillar los ojitos de pura impotencia. Es por eso que lo mejor es ahorrar electricidad y sumar un granito de arena al cuidado del medio ambiente.
Hablamos con Marcelo Mena, el hombre “cero emisión” y director del Centro de Sustentabilidad de la Universidad Andrés Bello, que nos dio muy buenos datos que verás en la infografía.
No hay por qué esperar que se quemen las ampolletas antiguas para cambiarlas. Es más caro dejarlas funcionando que cambiarlas. Es más caro gastar energía que lo que debemos invertir en ahorrarla. Además frente a las polémicas nacionales de proyectos energéticos, uno puede sentir que es parte de la solución y no del problema. Cada hora que dejamos encendida una ampolleta ineficiente le estamos echando una palita de carbón a la termoeléctrica, un kilito de cemento a las centrales hidroeléctricas. Por eso debemos reducir nuestro consumo.
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Pero podemos ir más lejos en el ahorro de electricidad.
Harry Pugin y Mathias Dagnino son dos “Pela Cables” que saben muy bien de esto. Su proyecto “Energía Libre” consiste en armar paneles solares. Lo hicieron a modo de proyecto de título que “tan solo pretendía buscar ahorro, pero se convirtió en una propuesta ecológica, segura, moderna, limpia, barata y encachada”.
Los creadores explican: “La propuesta es sencilla, tomamos uno de los consumos más importantes que tiene una familia promedio (iluminación) y llevamos el costo a 0. Solo basta sumar el ahorro que se genere en cada boleta y en dos o tres años contaremos con un sistema que genera energía de forma gratuita por alrededor de 25 años. Además las lámparas LED duran hasta 100 veces más, no contienen contaminantes como mercurio y gases nocivos, lo que se traduce en un ahorro a largo plazo, aliviando al planeta por la disminución de las emisiones de CO2”.
Mathias Dagnino/ mathias.dagnino@gmail.com/ 77487515. Harry Pugin/ harry.pugin02@inacapmail.cl
