Las comunidades costeras de la región chilena de Atacama están hartas de las presiones e irregularidades que viven en torno a la construcción de la Termoeléctrica Central Castilla. De hecho el observatorio de conflictos Ambientales (OLCA), han confirmado y denunciado ante la Corte Suprema, el hostigamiento que han recibido algunas comunidades por parte de las empresas OMX, CGX (ambas de brasil) y EON (Alemania).
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Estas empresas están engatusando, ofreciendo cerca de nueve millones de pesos a los pescadores, para que firmen un acuerdo en donde están ven obligados a no oponerse a la construcción de la termoeléctrica, este documento establece que incluso las familias y los descendieres de los pescadores deben acatar sin pataleo la construcción de la contaminante Central Castilla, que causaría un fuerte impacto negativo en el ecosistema de la zona y en los recursos con los que viven los pescadores artesanales.
Ante esta grave situación el OLCA espera la sentencia que en estos días dictará la Tercera Sala de la Corte Suprema, mientras se espera el fallo el Olca declara lo siguiente:
1- Las empresas OMX y CGX (antes MPX) y la energética alemana EON, se encuentran promoviendo, entre los pescadores de Caldera, quienes se verán gravemente afectados en su fuente laboral por la construcción de la Central Termoeléctrica Castilla y su puerto asociado, la firma de un “Acuerdo” que obliga a los firmantes y a sus familiares y descendientes, a no oponerse por ningún medio a la construcción y operación de la Central a carbón más contaminante del continente.
2- En efecto, el Acuerdo propuesto a los pescadores artesanales tiene por objeto evitar que éstos, sus familiares y descendientes, puedan recurrir a los tribunales de justicia para salvaguardar su derecho constitucional a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, pretendiendo instalar en su reemplazo, una suerte de “mercado”, en donde el patrimonio ambiental de los ciudadanos se transe al mejor postor.
3- La actitud de la empresa brasilera es especialmente grave, por cuanto ocurre a días que la Corte Suprema emita su sentencia definitiva sobre este caso, que lleva más de tres años de tramitación en los tribunales, habiendo fallos previos que demuestran que las autoridades locales, por presión de la empresa y del poder ejecutivo, incurrieron en ilegalidades graves.
4- Asimismo, lamentamos que los profesionales que asesoran a los pescadores artesanales a los que las empresas les han ofrecido el Acuerdo, no hayan informado debidamente a sus representados sobre las nefastas consecuencias de suscribirlo, por cuanto a cambio de una pequeña suma de dinero ($9.200.000) los propios pescadores, sus familias, y hasta sus descendientes quedarán impedidos de oponerse al funcionamiento de la Termoeléctrica y a los daños que ésta cause.
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5- Los vecinos del Pueblo de Totoral y los pescadores artesanales que no se han dejado comprar por el dinero de las empresas, han expresado con toda claridad que en Chile aún hay territorios que tienen valor y no precio, y que hay ciudadanas y ciudadanos que no están dispuestos a vender sus derechos básicos. Ellos aman y respetan su tierra, su agua, el desierto florido, su fauna, sus 400 años de historia en ese oasis en medio del desierto más árido del mundo. Esos son bienes que les pertenecen, y que no están dispuestos a negociar.
6- Agradecemos a los vecinos que denunciaron e hicieron público este acuerdo, lo que constituye una nueva muestra de la firme decisión del Pueblo de Totoral y de la gran mayoría pescadores de Atacama de decir No a Castilla, No a la Termoeléctrica y No al puerto.
Observatorio latinoamericano de Conflictos Ambientales, OLCA.
Santiago, agosto 2012
Fuente: Ante inminente fallo de Corte Suprema sobre Central Castilla (G80)
