Ya es bien sabido que la bicicleta es no sólo una alternativa más para transportarse por la ciudad, sino que es una de las formas más sutentables de hacerlo, al colaborar con el medio ambiente y con la movilidad urbana. Esto es importante en todas las ciudades, pero especialmente en una de las consideradas como las que más tráfico padecen en el mundo: la Ciudad de México.
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Y el tráfico incluye embotellamientos eternos, horas ‘pico’ casi todo el día, altos niveles de estrés, más contaminación auditiva, y además, dependencia de los combustibles (este mes fue el séptimo ‘gasolinazo‘ del año).
Es por ello que cada vez más ciudadanos optan por utilizar la bicicleta como su medio de transporte, mientras otros tantos aún no se animan a hacerlo por el miedo a lo que implica se ciclista en una ciudad tan transitada como ésta. Lo cierto es que conocer buenas medidas de sobrevivencia urbana, además de los derechos y obligaciones que como ciclista se tienen, hará mucho más fácil el perderle este temor al medio de transporte más sustentable de dos ruedas.
El año pasado la Secretaría del Medio Ambiente elaboró en conjunto con la asociación civil de fomento al ciclismo ‘Bicitekas’, un Manual para impulsar más este transporte, que busca ser una herramienta para ayudar a los ciclistas de todos los niveles a adquirir las habilidades que necesitan para desenvolverse en las vías y calles de la Ciudad de México, haciendo un uso responsable de su bicicleta.
Incluso si son de cualquier otra ciudad de la República Mexicana o de otro país, igualmente la gran mayoría de los tips de este manual seguramente les serán de utilidad. ¿Ya lo conocen? ¿No? Pueden leerlo y descargarlo aquí. Ahora sí ¡a pedalear!
Vía: Manual del Ciclista Urbano de la Ciudad de México (SMA)
