El arte de piropear no es una facultad que posean todos los hombres, al contrario, se necesita una buena cuota de inteligencia, agallas, una que otra técnica de seducción y por sobre todo, mucha picardía.
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Y la verdad es que frente a una buena frase soy capaz de responder con una sonrisa, incluso, sacarme el sombrero y aplaudir, manteniendo agradecidamente esa sútil, pero ahora coqueta indiferencia que tanto nos caracteriza.
Y es que un piropo bien jugado es capaz de alegrarte el día, hacerte sentir linda, olvidar por un instante todo rastro de síntoma pre menstrual y caminar con otros aires por la vida.
Como expertos en la materia tenemos a los maestros de la construcción, feriantes, cantantes itinerantes y cualquier individuo que aún tenga indicios de contar con un corazón de caballero, sin necesidad de caer en cursilerías como las violetas son azules, las rosas rojas, las naranjas anaranjadas y ¿qué sé yo? Me refiero a frases donde prime realmente el ingenio.
Hay quienes han optado por la calidad por sobre la cantidad y con palabras como ¡Abusadora!, ¡¡Asesina!!, ¿¿¿Eres real???, todas con una entonación particular, son capaces de hacerte estallar en carcajadas, rompiendo alegremente el esquema de un día en el que ibas como caballo de carrera.
Pero señores ¿Qué cresta es eso de ts-ts? del le chuparía hasta… ¡¿Hasta qué?! Si ni siquiera se les entiende lo que quieren decir en su extraño lenguaje de murmurar calentona y a mi parecer, asquerosamente un idioma declaradamente antisexy. Y no falta el viejo verde que te desviste con la mirada e invade tu metro cuadrado con el amague de un beso que nunca responderías en la vida. Pero qué falta de respeto, una verdadera deshonra a la creatividad. Pobres hombres.
O acaso ¿Nunca se han sentido violadas con tan sólo una mirada? ¿Pensarán en sus hijas, hermanas, mamàs estos caballeros cuando hacen eso? Y después de todo, la culpa es de la mujer y su provocativo escote o la minifaldita. Si hasta en octubre de 2010, la localidad italiana de Castellammare di Stabia prohibió este tipo de atuendos y con Berlusconi a la cabeza ¡Ja!, si esto parece una verdadera burla.
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Señor, si por ahí nos lee ocultamente, se siente identificado con los últimos párrafos de este artículo y todavía cree que puede conquistar a su identificada “hembra” con un apestoso mamiiiiita o peor aún, con un molesto ts-ts, le digo abierta y enérgicamente que esa NUNCA será una buena opción. Y como consejo…
Use un poco la cabeza, realmente se lo agradeceremos.